«Cuando nació Alejandro, en paritorio se enganchó enseguida y todo fue muy bien hasta la semana de nacer, que empecé a tener fiebre. Mi pecho derecho empezó a ponerse rojo y tenía mucho dolor. Tenía mastitis pero no era consciente de que eso existía. Seguí dándole de ese pecho a pesar de que tenía un […]