Soy Mariluz, mamá de Marta y Ángel, dos niños que ya son grandes para llevarlos en brazos. Confirmo que eso de que no hay que llevarlos tanto encima que se acostumbran no es verdad, ya me hubiera gustado a mí que se dejaran achuchar más tiempo… y no será porque no he disfrutado de llevarlos cerquita.
Cuando Marta nació me regalaron una mochilita, de las que más tarde supe que no eran ergonómicas. La llevaba todo lo que podía, a pesar de que ella iba incómoda y mi espalda lo sufría. Tenía 9 meses cuando descubrí por esta asociación de lactancia que había un taller de portabebés. Debo reconocer que al principio pensé: -menuda tontería, enseñarte a llevar a tu bebé en la mochilita, si yo lo hago desde hace tiempo, y no me ha hecho falta aprender de nadie-. Pero la curiosidad me pudo y asistí. Allí aprendí que había muchos tipos de canguritos, que se puede dejar el carrito en casa sin que se venga el mundo abajo, y que tu espalda no tiene por qué sufrir por llevar a tu bebé contigo.
Aprendí que tu bebé va contigo mejor que en ningún sitio y que de esta manera puedes cubrir mucho más eficazmente sus necesidades básicas. Que no sustituyen al carrito, pero que viene muy bien llevarlos siempre encima, por si necesitan estar cerquita de ti y encima debes cargar con el carrito.
Y sin duda, con el tiempo de usarlos aprendí mucho más, sobre todo cuando nació Ángel, que me fueron totalmente imprescindibles. Cuando tienes un bebé recién nacido y otro de año y medio, necesitas más manos que un pulpo, y los portabebés me hicieron mucho más llevadero el cuidarlos a los dos.
Os contaré cuál ha sido mi experiencia, y cómo el aprender a llevarlos me llevó a aprender a hacerlos. Después a aconsejarlos, regalarlos y seguir aconsejando, enseñando a otras mamás, al principio conocidas y con el tiempo a conocidas de conocidas.
He hecho algún que otro taller por aquí y por allá y muchas mamás en casa queriendo aprender a llevar a sus bebés cerquita. Después de todo este tiempo sigo disfrutando con compartir mi experiencia y sobre todo si los bebés están agustito y las mamás y papás también, con eso me vale.
También os cuento que llegué a hacer para vender, de manera totalmente artesanal, a mamás que me pedían para ellas o después para regalar. Ya llevo mucho tiempo sin poder coserlos por el trabajo, pero mi hermana es la que ahora los cose, y debo decir, mucho mejor que yo, para cuando aún me piden consejo y quieren alguno de este tipo.
Con el taller espero compartir mi experiencia, todo lo que he aprendido por el camino. Los tipos de portabebés ergonómicos que hay, porqué se les llama así y en qué se diferencian del resto. Cómo llevarlos y los beneficios y utilidades que tienen.
A alguno puede que le pase como me pasó a mí, que crean que solo hay un tipo y que suelen ser bastante incómodos, pero puede que os cambie la percepción y os haga encontraros las manos a la vez que cuidáis a vuestro bebé, como fue mi caso.
Espero veros el miércoles día 16 de noviembre en el centro Sociocultural de El Raval a las 17.00h, para contaros todo esto y más.
Un saludo, Mari Luz
Estoy deseando conocerte Mari Luz!!!
Gracias por tu comentario!